Capitulo provincia San José 2022: Llamadas a ser contraculturales desde el don de la diversidad

En la provincia San José hemos celebrado nuestro Capítulo Provincial realizado del 16 al 27 de octubre en la ciudad de Guatemala. Han participado 16 hermanas como delegadas de los cinco países que conforman la Provincia: República Dominicana, Puerto Rico, Nicaragua, Guatemala y México.

Este acontecimiento nos invitó a dejarnos guiar por el Espíritu y la fuerza de nuestros fundadores.  Sintiéndonos motivadas bajo el lema: llamadas a ser contraculturales desde el don de la diversidad.

Han sido unos días de reencuentro y encuentro, de compartir y escucha, de soñar juntas la Provincia y planificar nuestro caminar del trienio.

Nuestra hermana Geraldina Céspedes nos acompañó en la iluminación teológica y como representante del Consejo General.

En su reflexión nos recordaba que como Misioneras Dominicas del Rosario nos sentimos convocadas por un mismo Espíritu a ser testimonio de sororidad en el amor de Dios Padre/Madre y signo profético al estilo de Jesús de Nazaret desde los más pobres. Nos invitaba a  profundizar en la necesitamos de reencantarnos, recrear en nuestra espiritualidad el Amor Primero, que nos hizo vibrar, buscar, arriesgar y dar el paso de consagrar todo nuestro ser y toda nuestra vida a Dios y su proyecto del Reino.

Desde nuestra pequeñèz necesitamos seguir potenciando el que estamos llenas de vida entregada con la oportunidad de ser como aquel resto de Israel, los anawin, los pobres de Yavé que, desde lo humilde, lo pequeño, la minoridad, mantiene vivo el sueño de Dios.  Ademàs, estamos llamadas a vivir un liderazgo desde el paradigma de la sembradora, en el sentido que necesitamos sembrar semillas pequeñas, diversas, que requieren cuidado, paciencia, con capacidad de agacharse para escuchar el palpitar de la vida que brota.

La espiritualidad de la encarnación y el estilo de Jesús de Nazaret nos interpelan a una mayor inculturación, interculturalidad, transculturalidad y contraculturalidad. Jesús expresa con sus palabras, opciones y gestos: un orden diferente que rompe con sistemas patriarcales y jerárquicos que excluyen personas. Es desde ese estilo que tiene sentido ser contraculturales desde las Bienaventuranzas, llamadas a romper estructuras que nos alienan y fomentan el individualismo.  

Teniendo como base las realidades de nuestros pueblos donde estamos insertas y la realidad de nuestras comunidades, desde nuestra minoridad  como hermanas, somos llamadas a ser fermento y luz. Continuamos apostando por esta misiòn de ser portadoras de esperanza y vida, respondiendo a los clamores de nuestros hermanos y hermanas y. salir a encuentro en una iglesia sinodal.  Para ello nos sigue desafiando  la formaciòn integral de nuestras hermanas,  la urgencia de  continuar revizando y priorizando nuestras opciones misioneras, asi como potenciar una sana relaciones entre nosotras.

Seguimos caminando confiadas en la presencia del Dios de Jesùs  que va  junto a nosotras y nuestros pueblos.

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