CONSAGRAR…
Uno de los deseos hermosos y solemnes de un creyente, es consagrar su vida ante Aquel que es sagrado y es todo para el que lo jura. Como muchos otros, atesoro la experiencia de aquellos años y mi propia manera de consagrar mi vida. A menudo me pregunto: ¿Qué ofreceré a cambio? Los años de formación estuvieron llenos de preguntas y actos de ofrenda. Nunca ha sido fácil con los